Las fotos de la verguenza.

Son los nuevos buques negreros. Más grandes y modernos, con nuevas tecnologías, pero igual de vergonzantes que aquellos que surcaron esas mismas aguas en los siglos XVI y XVII. Estas fotos, tomadas desde un buque congelador español el 2 de octubre, suponen una prueba irrefutable de la existencia de buques nodriza que transportan cayucos hasta alta mar para, después, dejarlos lo más cercano a las costas de Canarias. Se puede apreciar las casetas prefabricadas instaladas sobre las cubiertas de los barcos, donde se hacinan los inmigrantes que no caben en las saturadas bodegas. Se pueden ver los complejos sistemas de comunicaciones compuestos por seis equipos de rádar y un sistema de localización vía satélite en cada buque. El gobierno, a través del secretario de asuntos exteriores Benardino León, ha negado la existencia de estos buques lanzadera, pero estos documentos gráficos, incontestables, demuestran lo contrario. Operan a nivel industrial, cientos y cientos de inmigrantes y decenas de cayucos en cada buque ofrecen una imagen bastante real de la impunidad con la que operan las mafias que se dedican al tráfico de personas. La mayoria de las fotos están realizadas a una milla de las costas de Senegal, pero hay una, especialmente significativa, en la que se puede ver claramente un buque nodriza anclado en la bocana del puerto de Dákar y en la que se puede observar la ciudad al fondo, incluido el minarete de la Mezquita de la capital senegalesa. Una foto que pone en evidencia el control de las autoridades senegalesas sobre la inmigración ilegal. Con estas pruebas, no cabe duda sobre la postura de Senegal al respecto, así como la eficacia de los sistemas de vigilancia puestos en marcha, se asegura, desde España. Fotos para la vergüenza y explicación, clara y contundente, sobre el fenómeno de la llegada masiva de cayucos a Canarias.